Vélez, campeón de la Liga: un premio para el mejor del fútbol argentino

Finalista este año de la Copa de la Liga y de la Copa Argentina, festeja el club que rescindió su contrato a jugadores denunciados por abuso y que le dijo “no” a una casa de apuestas.

El 25 de noviembre de 2023, Vélez le ganó 3–1 a Colón por la Copa de la Liga en Liniers, en su último partido de la temporada, y se salvó del descenso. Aquel día, el segundo gol lo metió Valentín Gómez (y el tercero, Claudio Aquino). Después de que empujara la pelota a la red tras el pase de Braian Romero, Gómez se besó el escudo de la camiseta. Poco más de un año más tarde, Vélez se consagró campeón de la Liga, el torneo “fuerte” del fútbol argentino, luego de que en 2024 fuera subcampeón de la Copa de la Liga y de la Copa Argentina acaso sin merecer perder las finales (cerrará el año, el sábado, ante Estudiantes de La Plata con el Trofeo de Campeones). En el 2–0 frente a Huracán en el José Amalfianti por la última fecha de la Liga, Vélez fue premiado: fue el equipo más regular, el que sostuvo el mejor juego en el año y el que, desde el empuje hasta las lágrimas de Gómez y la conducción de Aquino, jugó a jugar en la definición, con la valentía de querer ser el campeón.

Primero en la tabla anual de 2024, Vélez conquistó el 11° título de liga en su historia y se acerca a San Lorenzo (15), Independiente (16) y Racing (18). Estudiantes de La Plata, que lo antecede, suma seis. Si el segundo gol ante Huracán lo marcó Damián Fernández –23 años, de las inferiores–, el primero había llegado después de que Maher Carrizo (18 años) trazara la diagonal y se animara a encarar, frenar y asistir a Aquino

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El real mérito de Vélez es poner a los juveniles, darles la garantía de que tendrán un puñado suficiente de partidos para intentar hacerse valer, bancarlos, y que todo eso sea una política que lo constituye como club. 

En 2024, Vélez salió campeón de la Copa Proyección de Reserva y fue el campeón en cuatro de las seis categorías de las juveniles “Las mejores inferiores de Argentina están en Vélez”, dijo Carrizo. Frente a Huracán, cinco de los 11 titulares salieron de las inferiores (diez de los 25 futbolistas que jugaron minutos en la Liga). Tres décadas atrás, cuando Vélez le ganó 2–0 al Milan en la Copa Intercontinental 1994 en Tokio con Carlos Bianchi como DT, habían sido siete de los 11 los titulares surgidos de las inferiores. “Toda historia se repite; hay que creer”.

Después de coquetear con el descenso –y de que Gianluca Prestianni, la joya de las inferiores, fuera amenazado de muerte por la barra en la Villa Olímpica, lo que precipitó su transferencia–, los socios sacaron al oficialismo en las elecciones del 12 de noviembre de 2023. La nueva dirigencia, encabezada por el presidente Fabián Berlanga y el vicepresidente primero Augusto Costa, rearmó el proyecto con base en las inferiores, realizó una auditoría y, en un hecho inédito, expulsó como socio a Sergio Rapisarda, el presidente anterior. A mitad de 2024, a contramano de Boca y River y de un flujo tentador de dinero en el fútbol, Vélez no le renovó el contrato de publicidad en la camiseta a una empresa de apuestas online porque “no se correspondían” con los valores y “el rol social que tuvo el club históricamente”, en palabras del vice Costa (hoy tiene la de una pyme). La decisión no gana partidos. Pero es parte de un todo. En abril, tras ser separados del plantel, Vélez les había rescindido el contrato a cuatro jugadores denunciados por violación (Sebastián Sosa, Abiel Osorio, José Florentín y Braian Cufré).

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Volvamos a la cancha: Vélez se vigorizó después de que Gustavo Quinteros, el entrenador para 2024, surfeara en febrero un 5–0 de River en el Monumental (“Es un resultado que da vergüenza”) y, en octubre, el “cagón, ahora vamos a hablar” de Elías Gómez tras ser sustituido, expuesto ante los ojos de todos. En su segunda experiencia como DT en el fútbol argentino, Quinteros, 59 años, forjó un equipo protagonista. Sí, Valentín Gómez es un jugador de selección y Aquino estuvo presente en los 50 partidos de Vélez en el año. Pero también se destacaron Joaquín García, lateral derecho de oficio; en el equilibrio y las coberturas en la mitad de cancha, Christian Ordoñez y Agustín Bouzat; en los mano a mano, Thiago Fernández; las atajadas oportunas de Tomás Marchiori; y los goles –y el sacrificio para fajarse y apretar– de Braian Romero. Vélez, que sufrió su primer y único descenso en 1940, es el primer equipo campeón de un torneo de 23 fechas o más que no sea uno de los cinco “grandes” desde que se consagrara Newell’s en la temporada 1987/88. Y desconocemos cuándo será el próximo, porque al menos hasta 2026 no habrá un torneo de liga en el fútbol argentino. Como premio por la Liga 2024, Vélez recibirá 500 mil dólares, ocho veces menos que el que paga la de Bolivia. Ajá: no trates de entenderla.

Hasta 1993, Vélez había ganado apenas un título: el Nacional 1968, con los goles de un Bianchi de 19 años y la elegancia de Daniel Willington, bajo la presidencia de José “Pepe” Amalfitani, quien moriría de cáncer de pulmón el 14 de mayo de 1969. Bianchi volvió a Vélez en 1980. Y al año siguiente se convirtió –y aún lo es– en el máximo goleador histórico del club (206). Este domingo vio a Vélez campeón desde la platea. En recuerdo de Amalfitani –así se llama el estadio– también se declaró el 14 de mayo como el Día del Dirigente Deportivo. “Mientras haya diez socios –repetía en épocas malas– el club seguirá en pie”. Antes siquiera de que Vélez clasificara a los cuartos de final de la Copa de la Liga 2024, un niño fortinero había relatado: “Tuve una revelación. Me encontré a un señor petiso, calvo, con lentes, y me dijo: ‘Vélez va a salir campeón’. Me despierto y le digo a mi papá: ‘¿Quién era ese señor petiso, con lentes y pelado?’. Y me dice: ‘Es don Pepe Amalfitani’”. Un sueño hecho realidad. Lo atrapante del fútbol es que no es justo, que no siempre gana el que lo “merece”. Aunque a veces sí lo es. Y hay coincidencia.

Pizza post cancha

  • Artículo. Jonathan Northcroft aborda la homogeneización y la uniformidad aceleradas del juego en la Premier League desde la irrupción de Pep Guardiola como DT de Manchester City (2016): menos gambetas en el último tercio de la cancha, la casi desaparición de los tiros desde afuera del área y las posesiones de pelota más lentas en el afán imposible de la búsqueda del control total. “El fútbol es absolutamente increíble en 2024. Y un poco decepcionante. ¿Está todo empezando a parecer igual?”, interroga en The Sunday Times.
  • Frase. De Lionel Messi: “Hay una nueva generación de futbolistas jóvenes que es muy buena y que tiene muchos años por delante. Si me tengo que quedar con uno, por lo que hizo hasta ahora con la edad que tiene y por el futuro que tiene, me quedo con Lamine (Yamal, 17 años). Depende de él y de muchas cosas. Es presente y sin duda tiene un futuro enorme”. En alguna de las próximas entregas, seguro perfilaremos a Lamine Yamal. Es el elegido –y desde que era bebé– de Messi.
  • Entrevista. Omar De Felippe, técnico campeón de la Copa Argentina con Central Córdoba de Santiago del Estero, combatió en la guerra de Malvinas. En el ciclo “Contar la vida” (DeporTV), con la conducción del escritor Eduardo Sacheri, leyeron el cuento Clase 63, de Pablo De Santis, mientras hablaban de fútbol, de su trayectoria como futbolista y DT.

Es periodista especializado en deportes -si eso existiese- desde 2008. Lo supo antes de frustrarse como futbolista. Trabajó en diarios, revistas y webs, colaboró en libros y participó en documentales y series. Debutó en la redacción de El Gráfico y aún aprende como docente de periodismo. Pero, ante todo, escribe. No hay día en la vida en que no diga -aunque sea para adentro- la palabra “fútbol”.